Nuevamenta Alemania nos sorprende con sus pueblos. Esta vez estamos en una increible terraza frente a cuatro cervezacas, sí, yo también, mientras se pone el sol. Estamos alojados en una guest house en la que nos han dejado lavar nuestras monturas y además no me han matado después de tirar la bici sobre uno de sus espectaculares rosales… En fin, ducha caliente, habitación doble con baño compartido y las jamelgas a cubierto. Hoy el día ha empezado con mucha lluvia y a sabiendas hemos retrasado nuestra salida del camping todo lo posible. viendo que ni siquiera aflojaba, decidimos salir a rodar.
A los 5 km paaramos a desayunar. Continuamos y la lluvia no amaina hasta los 10 ó 15 km y viendo el percal, decidimos no separarnos.
Antes de llegar a Donauworth, donde queríamos comer, como no!!! avería!!! Esta vez le ha tocado al trasportín de Paco al que se le ha roto el tornillo que va al cuadro.Sin mayor problema, reparamos la avería. A rodar y pronto llegamos a nuestro destino para comer.
Por la tarde vuelta a las monturas con muchos sube y baja y rompepiernas, que se nos han dado muy bien y antes de darnos cuenta ya habíamos llegado a la guest house. Por cierto la lluvia finalmete nos ha respetado.
Parece que Paco tiene algunos problemas reiterados con su bici, lo mismo sería conveniente que se comprara otra, no se, es una sujerencia.
Por aquí todo sigue como lo dejasteis, mamá dice que además de buenos ciclistas sois buenos atletas, por lo de los saltos, la pobre lleva pensando que deciros toda la tarde, papa, en fin que cuando volveis, la abuela que dios le pague a los alemanes en haberos ayudado, no temais no le vamos a comprar ninguna bici a la abuela. Espero que os divirtais y que lo sigais pasando igual de bien que hasta ahora besos para todos.